El algodón orgánico se cultiva libre de sustancias tóxicas como pesticidas, fertilizantes o insecticidas derivados del petróleo.
Presenta beneficios importantes para los productores, los usuarios y para el planeta, al reducir el uso de sustancias químicas y de agua, imprescindible en su cultivo y producción
Su creciente utilización ha frenado el uso de semillas transgénicas, recuperando la rotación de cultivos, el empleo de fertilizantes orgánicos e impulsando variedades que se estaban perdiendo al no ser compatibles con los latifundios algodoneros, factor que ha favorecido a la reaparición de los pequeños productores.
GOTS es la norma de procesamiento textil líder en el mundo para fibras orgánicas, que incluye criterios ecológicos y sociales, respaldados por una certificación independiente de toda la cadena de suministro textil.
Esta transparencia también ofrece a los consumidores la posibilidad de elegir productos verdaderamente ecológicos procedentes de cadenas de suministro ecológicas.